Furia detenida en el instante exacto. Este busto del Colacuerno Húngaro (Hungarian Horntail) atrapa la tensión del Torneo de los Tres Magos con un esculpido lleno de nervio: fauces abiertas, cuernos afilados y llamas translúcidas que trepan por la roca mientras custodia el huevo dorado. Mide aproximadamente 30 cm de altura y está realizado en resina con pintura a mano, lo que resalta escamas, cicatrices y el brillo del fuego sobre la base decorada. La pieza, con licencia oficial, tiene peso y estabilidad para lucir en vitrina o escritorio y aporta ese punto épico que convierte cualquier rincón en un fragmento del mundo mágico. Un busto poderoso, duradero y listo para ser el centro de tu colección.